Blogia
elsanto

¡Que día tan divertido!

¡Que día tan divertido!

Fuí al Cerro para pasar un buen rato. Fuimos mi padre, mi hermano y yo. Nos comimos entre los tres una tortilla de patatas.

Nos encontramos con algunos primos de mi padre, que también son mis primos.

A mi hermano le compraron un globo que era un delfín. Nos íbamos a montar en unos caballos que allí había, pero al final no pudo ser, porque estaban todos descansando y comiendo.

Yo me monté en un payaso que tenía una cuerda y una escalera para subirse y tirarse por la rampa, y como hacía mucho sol, me quemé. RUBÉN MAROTO

0 comentarios