Había una vez un niño que se llamaba Francisco, pero todos lo conocían por Fran. Una noche se acostó y su madre le dio las buenas noches y apagó la luz. Cuando estaba dormido, apareció un personaje llamado Dom, con el pelo azul y lo despertó y le dijo que un malvado llamado Grania, que era el que provocaba las pesadillas, iba a aparecer enseguida, para provocarle una gran pesadilla. Apareció una cabeza en la pared, que se dedicaba a espiar y entonces Dom se marchó, y Fran se quedó solo con mucho miedo. De pronto llamaron a la puerta, y no quería abrir. Entonces quien llamaba pasó por la estanteria que había en la habitación. Era la señorita Rosa, su antigua maestra de música, que le encantaba anudar zapatos.
Apareció de nuevo Dom, que venía a decirle que Grania se acercaba con una terrible pesadilla: Primero oyó la voz de su hermana, que le llamaba para que le abriera la puerta, pero no hizo caso. Después se abrió la puerta y empezaron a caer grandes bolas y se tuvieron que cubrir con el colchón. La tercera trampa fue un gusano gigante que entró en la habitación soltando un olor muy asqueroso y les echó un pegamento y no se podían mover de donde estaban. Y por último entró Grania, con su gran capa negra, y les dijo que les había ganado. Que era su cumpleaños, y por eso le había querido dar el susto a Fran.
Le cantaron "Cumpleaños Féliz", que le puso muy contento, y además le regaló Dom una capa blanca, que se la puso enseguida. Salío la señorita Rosa, y todos juntos cantaron y bailaron felices. Y colorín colorado este cuento que han escrito JORGE y MARTA se ha acabado.
